Resurección

El jueves por la mañana me suben a planta, el trayecto desde urgencias hasta la habitación lo recuerdo a toda prisa la enfermera corriendo por los pasillos para que no me diera nada, y yo medio zoombie con todas mis cosas encima de la cama. Una vez en la habitación, ya me puedo quitar la máscara, son los que entran los que tienen que llevarla, con la bata , guantes, etc....
Yo me encuentro fatal, entre que no he dormido y la garganta ( me salieron yagas, placas , hongos, por toda la boca ) el cuello se me hinchó tanto  de la infección que no podía ni tragar saliva y mucho menos agua, parecía el "Don Limpio, vamos el Mister Proper" de toda la vida, seguía con fiebre, y muy volada de cabeza.
Al rato vinieron Jorge y mi madre, los pobres con todo el berenjenal puesto para poderme ver y con cuidado de no tocarme mucho, ni nada de naaa.
Ese día lo recuerdo largisímo , me traen jarabes para enjuagarme la boca , pero nada me hace nada, y encima empiezo a tener arcadas, y ganas de vomitar, viene a verme la oncóloga y me dice que lo que me ha pasado no es  normal, que sí bajan las defensas, pero no tanto que hay algo que no va bien en la quimio y hay que revisar mi tratamiento(pues que bien me dejas mas tranquila...jur jur, pensé yo), la verdad que en ese momento ni me había planteado si todo eso era normal o  no, pensaba que me había dado un chungo y que eran cosas del tratamiento, "efectos secundarios", pero resultaba que no era normal......Llevaba casi mas de un día sin dormir, con fiebre, ganas de vomitar, con la garganta que me mataba , muy nerviosa, ya que cuanto peor me encontraba mas inquieta estaba, me levantaba millones de veces al baño a lo que fuera, con la medicinas enganchaas, me tumbaba, me sentaba, ...en ninguna postura me sentía agusto y eso siempre cerca de mi bol escupidero, que se hizo mi "amigo fiel".
La noche del jueves ni dormí , me dieron un jarabe nuevo que tenía anestesia y funcionaba mejor, pero no era mágico, de la inflamación que tenía casi me costaba respirar, la fiebre bajaba con los chutes que me metían pero a las 4 o 5 horas volvía a subir, recuerdo a mi madre poniéndome paños frios en la frente , destapandome para intentar que no me subiera y yo tiritando helada del fiebrón, a mitad de noche vomité , pero era todo del estómago , ya que llevaba desde hacía más de un día sin comer.
Cuando amaneció lo agradecí, ya que por lo menos ya habíamos pasado la noche, la visita de la Oncóloga fue buena, me habían subido las defensas a 200, si subían a 500, me quitaban el aislamiento, yupi!!!!, sobretodo para Jorge y mi mama, los pobres dormía con todo puesto (los guantes decían que se adherían a su piel de tal manera que luego era imposible quitárselos, y dormir con la máscara puesta es un agobio , tenían que salir de vez en cuando de la habitación para poder tomar aire)
El viernes casi lo pasé entero en zoombieland, ida perdida y medio adormilaaaa, el jarabe nuevo empezaba a funcionar y a pesar de que aun no tragaba bien ni podía comer, la anestesia hacía efecto junto a la cortisona que me metían en vena para bajarme la inflamación, hacían que pudiera dormir a ratillos; La verdad que estando en aislamiento , te dejan muy tranquilo, casi ni entran a verte las enfermeras, solo para los cambios de medicinas o tensión y cosas así , sino ni pasan ya que ponerse y quitarse todo el tinglao era un coñazo , así que.....había bastante tranquilidad recuerdo a Jorgito y mi madre sentados mirándome y yo medio adormilaaaa. Por la tarde me encontraba algo mejor así que aproveché en sentarme en el sillón y ver el móvil un rato(ver los mensajes, whattapps y cosas así, la verdad es que tenía la cabeza volaaa, pero necesitaba sentir que volvía a ser persona y hacer cosas de personas, ya que hablar todavía no podía bien por la infección).

Resurgiendo de mis cenizas, ya me visitaban las enfermeras

El sábado ya me desperté con otra cara, bueno la verdad es que físicamente parecía un preso de un campo de concentración, pero me notaba más fuertecilla, las defensas ya me habían subido a 470 , así que me quitaban el aislamiento, eso de ver la puerta abierta de la habitación era maravilloso, poder salir a dar un paseo o recibir visitas de gente "no alienigena"(sin todas las parafernalias verdes) que se les veía la cara , era espectacular!!! .
Ya pude empezar a comer, me gustaba la sensación de poder tragar sin dolor, aunque no tenía nada de hambre, procuraba hacer el esfuerzo y así me podrían quitar el suero.

Ñam, ñam rico donuts de desayuno

El domingo pasó muy rápido con visitas de toda mi familia y amigos , yo de subidón ya que de tantos chutes que me metieron tenía las defensas por las nubes, llevaba un día sin fiebre, la garganta había bajado, y me encontraba bien, y eso me hacía sentirme feliz, si seguía todo así , el lunes me darían el alta y podría volver a casa, a mi vida, había estado tan malita , que creí que no salía de ésta.

De subidón de defensas

Ya me quiero irrrrrr

El lunes me dieron el alta, y después de comer , Jorge y yo volvimos a casa, muy idos los dos, yo no podía parar de llorar , se me saltaban las lágrimas, me parecía increíble que 4 días antes hubiera estado tan mal, y ahora me veía tan tranquila iendo a buscar a mi niña como cualquier otro día, era una sensación muy rara.

Mi nena preparaba mi llegada.